Artículo de Opinión

Magistrados del T.J.A. ineptos, chambistas; no actúan por temor a ser despedidos

Memo Rguez.

Miércoles, 12 de Septiembre del 2018. 2:01:34 pm

Letra más grande

En el colmo de la ineptitud y de la obsolescencia se encuentran sumidos los Magistrados del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Nayarit, quienes ante la amenaza de ser destituidos por la forma en que arribaron a su encargo, procedimiento que se aperturó por el Congreso del Estado dada la serie se irregularidades y excesos del que se les señala, y que en estos momentos se dirime en diversos juicios de amparo promovidos en su defensa por los supuestos afectados, ha redundado en que los magistrados pillos de Roberto Sandoval, ejerzan su encargo con pleno desgano y opacidad, cuidando en todo momento no hacer enojar al gobernante en turno, por resolutorios que están obligados emitir según sus atribuciones y obligaciones y que conforme a derecho y la razón tienen que ser contra los intereses de los entes gubernamentales del estado, lo que viene a dar al traste la Justicia Administrativa en el Estado, la cual de por si estaba ya en estatus de deplorable, derivado de que cuando arribaron los magistrados chambistas, desconocían de plano la especialidad de la materia, siendo incrustados en esta segunda era del nuevo tribunal, por los méritos mostrados en materia de sumisión, abnegación y lame botas del entonces gobernador.

Lamentable resulta que en medio de esa imbecilidad de los magistrados, de sus miedos o simplemente por ser simples esbirros de ex gobernador del estado, quede el ciudadano común y corriente, sin obtener la justicia que fueron a buscar a ese Tribunal de Justicia Administrativa, el cual cada día cae en una espiral de inutilidad, congelando cientos de expedientes que tienen que resolver contra el gobierno del estado; así se encuentra un número importante de permisionarios del transporte público, que acreditan haber adquirido mediante cesión de derechos en la administración pasada permisos de taxi, documentándose que los mismos fueron obtenidos cumpliendo todos y cada uno de los requisitos de ley, por tanto fue que se les otorgó placas y tarjetas de circulación, incluso fueron relacionados en el padrón de permisionarios publicado mediante decreto administrativo en el periódico oficial del gobierno del estado, dándole con ello publicidad y autenticidad a dichos permisos, no obstante, aun a pesar de ello, la dirección General de Tránsito, determinó que los mismos son ilegales, dando la orden de no refrendar las unidades que tuviesen una antigüedad menor a tres años, afectando con ellos a cientos de familias que producto de un esfuerzo adquirieron sus permisos, invirtiendo sus ahorros que oscilaron entre cien y ciento treinta mil pesos.

Bajo esta razón fue que decenas de permisionarios han recurrido ante los señalados ineptos magistrados, demandando los actos que consideran estar afectados de ilegalidad, solicitando además se les otorgue la suspensión del acto reclamado, esto es, se les permita circular mientras se resuelva el juicio de nulidad, la que es negada pretextando una serie de barrabasadas, siendo el verdadero fondo de su negativa, según expresiones de los propios flamantes magistrados, que no harán más resolutorios que hagan molestar al gobernador en turno, y que prefieren llevar la fiesta en paz, para tratar de disuadir el juicio político de desafuero. Lo cierto es que el ciudadano afectado, que trabaja bajo la cultura del esfuerzo, se topa con un tribunal de injusticia, con mediocres aferrados al hueso, chambistas, tratando seguir mamando de la ubre del presupuesto público, el cual por cierto no es nada despreciable, ya que su salario oscila en los 150 mil pesos mensuales, sin hacer su trabajo para no hacer enojar a sus nuevos patrones.